(Colgante del círculo de trigo Diessenhofen, CH 2008) La formación tiene una fuerte energía positiva y fortalecedora. Actúa sobre todos los chacras y glándulas. Los pensamientos positivos se acentúan, aumenta la alegría de vivir y el sistema inmunológico es fortalecido. Ayuda a las personas en situaciones difíciles a recordar lo positivo, a conectarse con Dios.