Esencia de Araña - Spinne

(Araneus diadematus)

Las arañas están compuestas por dos partes, ya que la cabeza y el tórax se han fusionado para formar el así denominado cefalotórax y luego está el abdomen. En el cefalotórax se encuentran seis pares de apéndices. En primer lugar vienen las pinzas ponzoñosas o quelíceros, que son instrumentos en forma de pinzas o garras que se utilizan para la absorción del alimento. Poseen una función sensorial y son utilizadas por los machos para la transferencia de esperma. Luego vienen los pedipalpos, que son parecidos a patas o garras amplificadas; los otros cuatro pares son de locomoción. En el abdomen se encuentran las glándulas sericígenas, con las que pueden producir los hilos de seda. Las arañas son depredadoras, ellas atrapan y derrotan a sus presas, pueden inyectarles veneno y escupir sobres ellas enzimas digestivas, chupando el líquido que se origina. En todo el mundo existen aproximadamente 40.000 especies dentro de alrededor de 100 familias.

La Araña en la Mitología: Arachne (del griego „araña“) es una figura de la mitología griega, la que aceptó competir contra Atenea (para los romanos, Minerva) y le ganó. Por eso la diosa Atenea se puso tan furiosa que convirtió a Arachne en araña. Los egipcios y los griegos consagran las arañas a las diosas del destino. En la mitología germana, las normas (espíritu femenino de la mitología nórdica) tejen los hilos del destino. En el hinduismo, la tela de araña representa el orden cósmico, en cuyo centro la araña teje las ilusiones del mundo. Las tribus indígenas consideraban a las arañas como seres poderosos y solícitos. Eran veneradas, y los indios hopi las consideraban la bisabuela, que tenía una gran importancia en la creación del mundo. El “atrapasueños” indígena también es una tela de araña, que sería capaz de alejar a los malos sueños si uno lo cuelga sobre la cama. En alemán, “araña” también significa “hilar” y “estás hilando” es una expresión para decir que alguien está loco.

La Araña en la interpretación de los sueños: puede ser un indicio de grandes miedos inconscientes todavía no elaborados. También nos puede mostrar qué es lo que nos impide desarrollar plenamente nuestro potencial. (Esto pueden ser personas o seres astrales que utilizan nuestra energía).

La Esencia de Araña: La araña nos puede ayudar a percibir mejor las emociones dentro de un grupo o de la familia. Nos ayuda a poder soltar y a desarrollar una mayor interacción y un respeto incondicional.

En el plano físico: La araña nos puede ayudar a desarrollar mayor energía vital. Nos ayuda a hacernos conscientes de quién o qué interfiere con nuestra energía vital (parásitos) para poder liberarnos de él. Con ello logramos que nuestra fuerza vital pueda fluir libremente y fortalecemos nuestras fuerzas de autosanación, pudiendo hacer más fuertes nuestros hilos vitales sin seguir enredándonos en otras redes.

En el plano emocional: La araña fortalece nuestra percepción. Está sentada en el medio de su red y quiere controlar todo. También nos lleva a los rincones más oscuros y tenebrosos, para darnos cuenta cómo están las cosas allí y poner orden. Si usted le teme a las arañas, pregúntese el por qué. ¿Cuán dispuesto está a permitirle a los demás su libertad, sin manipularlos ni controlarlos? La esencia nos ayuda a desarrollar una nueva manera de relacionarnos con los demás y a soltar los miedos. Aprendemos a liberarnos de energías pesadas, pero también aprendemos a regalarle a los demás libertad y amor incondicionales. Se trata de disolver los entretejidos emocionales, los que nos hacen infelices a nosotros y a los demás.

En el plano espiritual: La araña puede hacernos conscientes del ámbito de nuestra vida en el cual seguimos metidos en el lamentable papel de víctima. Aprendemos a ver más allá del borde de la red y a soltarnos a nosotros mismos y a los demás, a liberarnos de la red de las dependencias. Conscientemente abandonamos el papel de víctima y experimentamos cuan lindo puede ser el volvernos conscientes, el ser nosotros mismos los artífices de nuestra realidad. Salimos de la oscuridad del papel de víctima y aprendemos a desarrollar nuestros sueños como personas conscientes.