El alma está sobre la materia. La esencia ayuda a conectarse nuevamente con lo sagrado, con lo celestial. Aprendemos que todos nuestros esfuerzos en pos de poder y dinero que realizamos en nuestra estadía terrenal no significan nada en comparación con la felicidad y la alegría que podemos encontrar cuando nos conectamos con Dios. Es apropiada para la reactivación de lugares de poder.