La formación actúa sobre todos los chakras y centros energéticos. Actúa sobre el ADN y ayuda a liberarnos de nuestra negatividad interior, de los sentimientos negativos, los miedos y las limitaciones. Nos ayuda a desplegar nuestro potencial interior, nos libera de los patrones negativos de pensamientos, aumenta nuestra autoestima y nos ayuda a hacernos fuertes por dentro y a confiar en la guía Divina.