Este círculo de trigo se creó en una zona que fue escenario de grandes matanzas en la historia de Europa. La esencia nos conecta con nuestro subconsciente. Aprendemos a ver quiénes somos realmente. Fortalece nuestra autoestima y nuestra fuerza interior. Reconocemos cómo, como seres humanos a lo largo de la historia, fuimos manipulados reiteradamente por grupos. Fortalece nuestra confianza en nuestra fuerza interior y nos ayuda a alejarnos amorosamente de estas manipulaciones para impedir que actúen sobre nosotros.