Este ser vivo está compuesto por 4 células unidas linealmente y cubiertas por una capa protectora. Son difíciles de ver a simple vista. La esencia apoya procesos de desarrollo. Apoyo energético para las células, para seguir desarrollándose, para crear las formas y para transformarse. Así como de un gusano se forma una crisálida y de ahí una mariposa, nos lleva a seguir desarrollándonos y a madurar internamente. Ayuda a poder encontrar la meta en la vida. Da sensación de erguirnos internamente, de afianzarnos correctamente en el cuerpo. Apoyo energético para el crecimiento. Aumenta nuestro valor propio, nos ayuda a encontrar nuestro potencial interno, fortalece la integración en el cuerpo, la consciencia corporal, la aceptación también en procesos de cambios. Acción energética sobre el primer chakra.